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Decía Alfonso Guerra: «El que se mueve no sale en la foto». Así era él sobre todo cuando más que la mano derecha de Felipe González se creía su cuerpo entero. Ahora es distinto: el que no se mueva no sale en TikTok. Ni en Twitter, ni en Instagram, ni en... No sigo, porque si sigo, esto no se acaba nunca. Alfonso Guerra no es el abuelo de Ana Guerra, la cantante. Es un político sevillano que mandó mucho y que cuando más disfrutaba era cuando se anticipaba a lo que acaba de comenzar: la cita con las urnas. En realidad, acertaba Ludolfo Paramio, pero esa es otra historia. Lo digo, porque en lo algorítmico, si coinciden TikTok y Guerra, sale antes la cantante. Luego igual hasta sale Ucrania. Y León Tolstói, que nunca hay que perder la esperanza. Los políticos de León salen en la foto. Las páginas de Diario de León dejan constancia de que el primer paso lo han dado y la campaña, ajena ya a pandemias y demás, tiene más de lo de antes (sonrisas y carteles en la mano) que ese momento intermedio nada lejano de campañas virtuales y visitas con mascarilla. Se contaba en este periódico que incluso los de Ponferrada, con una curiosa tradición: todos los partidos juntos cerca de la plaza Julio Lazúrtegui. Eso sí que es una buena economización de espacios. Estos días serán de promesas y mensajes. Y se espera que de estrategia. En Estados Unidos hay la figura del publicista, que es el que dirige y promociona la presencia pública de los actores y gente relevante, léase ahora nuestros políticos. Algo así como el jefe de prensa, director de comunicación y similares. Hubo una vez que a un jefe de prensa, hagamos convención del término, por un conflicto ajeno, alguien decía a alguien: que te lo solucione tu publicista. Era un fallido término peyorativo en ese contexto. En esta campaña, serán decenas, a nivel local, y miles a nivel nacional, los jefes de prensa que estarán al acecho de ese espacio que dé relevancia al trabajo de sus jefes. Pero, ‘a qué se dedica un jefe de prensa’ es una pregunta recurrente. Pasar mucho estrés es seguro que gran parte de su trabajo. A veces, si lo hace bien, puede que le llamen publicista. Pero todo esto solo son contingencias de la necesidad.