Editorial | Gatos callejeros problemáticos
La pedanía de Santo Tomás de las Ollas, en Ponferrada, está viviendo una situación «alarmante» por la creciente población de gatos callejeros y la junta vecinal contempla ya aplicar la ordenanza con sanciones de entre 300 y 1.000 euros a quienes alimenten a gatos callejeros sin tener autorización para ello. Es una situación que se ha agravado en los últimos meses hasta amenazar con generar un problema de salud pública para los vecinos. En Santo Tomás de las Ollas no consideran que estos felinos pertenezcan a la categoría de «gatos comunitarios», un concepto novedoso incluido en la polémica Ley de Bienestar Animal que eleva el nivel de protección de estos animales cuando, siendo callejeros, cumplen una serie de condicionantes como su vinculación con el territorio y que los humanos se ocupen de ellos. Una línea muy fina que, como otras que ha marcado esta ley, genera confusión.