¿Y quién lo pide?
Exigen que, si en el Bierzo pretenden rotular indicadores de carretera en castellano y gallego, añadan además el lleunés (ahí lo tienes, báilaló, báilaló, no le quites el mandil, el mandil), mandando así lo trilingüe, trinidad fantástica letrera que obligará además a sobregastos en rotulación y tamaño de las señales con las que se montará, al fin, una Babel que sólo sirve para excitar orgullitos locales y disimular complejos universales, aturullando de paso a extraños e incluso a propios, pues más que indicador, eso parecerá declinación o diccionario. ¿Y quién pide tal: el pueblo soberano o el necesitado de lengua soberanista?...
A quienes esto exigen se les recuerda que en buena parte del Bierzo ese lleunés les suena a esquila ajena y lejana, a otro rebaño, aun teniendo alguna coindicidencia y familiaridad. Hasta pueden tomárselo como lengua invasora o colonizadora si les plantan ante su casa ese lleunés que jamás se habló allí donde la estrecha vecindad galaica -tan pareja, tan encima- lleva siglos permeabilizándolo todo con su cantar y «gramática» oral, un habla fronteriza -y por tal, mestiza- para la que el pueblo no necesitó dómines ni planes de extensión lingüística como esos en los que sigue muy-muy empeñada en el Bierzo la Academia Galega... y los indicadores de carretera.
Cada cual habla siempre la lengua que mamó de la madre. Y a muchos les dará cosa tener dos madres o tres y que, además, se lo insistan a cada paso en indicadores donde ya sólo faltará el inglés que hoy impone el pijobritish. Algo de ridículo se hará tambor ahí, como ridículo es duplicar el callejero de esta ciudad que en tantos casos sólo mueve a risa. Y aquí viene el juez con la aclaradora pregunta: ¿qui prodest? , ¿ a quien beneficia todo esto?, ¿al pueblo al que jamás verás hablar y aún menos necesitar un lleunés que sólo rula escritu y artificiosu?, ¿será entonces que el beneficio sólo lo busca el lleunesista llenguaraz y llambrón esperando colocación y el político in albis para decir que somos diferentes y, por tanto, bueyes sueltos con derecho a lamerse?...