Inventa tu historia
Por el testamento con el que John Ford legó el western sabemos que «en el oeste, a la hora de elegir entre la verdad y la leyenda, se imprime siempre la leyenda». Pero no pensábamos que, de pronto convertido en admirador de El hombre que mató a Liberty Valance, Alfonso Fernández Mañueco nos quisiera convencer, como el director del periódico reconviene al reportero en la película, de que tenemos que tragar con un mito contrario a los hechos, ese que venden de que Castilla y León llevarán juntos 800 años en 2030. No, hombre, no. Se nos han hecho largos los 40 años del engendro autonómico, pero tampoco hay que exagerar. Ni mucho menos tergiversar los episodios históricos para reclamar al Gobierno que se involucre en la organización de los fastos de una conmemoración de Especial Interés Público -las mayúsculas las pone la Junta- con la que adobar de nuevo la fallida identidad regional en la que se han dilapidado más millones que en la herencia de Cantora. Menos mal que a los ideólogos del gabinete de propaganda no les ha dado por buscar la relación en los pequeños terremotos de las últimas semanas en la provincia leonesa, marcada por los movimientos de las placas tectónicas, porque hubieran reivindicado Pangea.
El nuevo empeño amenaza con revisitar la historia de España de los últimos ocho siglos para vestir una decisión administrativa de los años 80, en contra de las reclamaciones de los leoneses, como un hito de 1230 y a Fernando III como el ideólogo de Martín Villa y Peces Barba. La nueva acometida de la maquinaria de la construcción de una identidad artificial insiste en amalgamar todo para alumbrar en el laboratorio social al hombre castellanoleonés . ¿Mande? Incluso nos prometen que la fiesta de la comunidad tendrá «protagonismo y presencia en las nueve provincias». No, gracias, aquí somos de San Froilán, en la romería de La Virgen del Camino, patrona de la Región Leonesa, la cita que ya tarda la Diputación Provincial en reivindicar como el Día de León.
La Junta debería de empezar por aplicarse el lema de su última campaña de Turismo: «Castilla y León. Parece que la conoces, pero no». La verdad, la leyenda esa de Mañueco aquí no se la cree nadie.