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No es una imagen poco frecuente, a pesar del peligro que supone. Los rebaños de vacas y caballos, también de ovejas, que pastan sin control en numerosos municipios de la montaña leonesa invaden sin miedo las carreteras, y ponen en grave riesgo a los conductores. Pero además están generando problemas sanitarios en los municipios donde proliferan. Los ayuntamientos carecen no sólo de capacidad en materia de sanidad animal para solventar este creciente descontrol de los rebaños, sino de posibilidades de imponer sanciones a los propietarios del ganado, lo que se antoja de momento como la única medida que podría poner remedio al problema. Una situación que además está generando conflictos entre los vecinos, porque los animales sueltos invaden fincas y explotaciones ajenas. Los alcaldes de Acebedo, Maraña y Burón exigen soluciones a la Junta y el Gobierno. Deberán adoptarlas antes de que haya que lamentar males mayores.