Editorial | Paso clave en los nuevos regadíos
La modernización del Páramo Alto ha sido un proyecto marcado por una sucesión de problemas que lo ha dilatado en exceso. Quizá por ello, la Comunidad General de Regantes quiso celebrar ayer por todo lo alto, con un acto conmemorativo, que se haya completado. La puesta al día de las infraestructuras de riego merece toda la atención de las instituciones públicas, por sus efectos directos en el sector agrario —mejorando la actividad, los rendimientos y el empleo— y también en los ineludibles objetivos medioambientales, al propiciar un aprovechamiento del agua más riguroso. Ahora sólo queda pendiente una parte de obras presupuestada en 13,5 millones, que requiere de toda la celeridad que sea posible.