Editorial | Eficacia para frenar el suicidio
Durante demasiado tiempo fue un tema tabú, lo que frenó la posibilidad de plantarle cara. El suicidio es hoy una realidad palpable en la calle, con unas estadísticas que sorprenden por su dureza. Y también por la presencia de personas muy jóvenes entre las víctimas de este fenómeno para el que los expertos reclaman un plan nacional.
Una vez que ha quedado claro que dándole la espalda no se lograban resultados, parece necesario que se realice un análisis riguroso sobre sus circunstancias y las fórmulas que recomiendan los investigadores para buscar soluciones alternativas. El Teléfono de la Esperanza facilita quizá la herramienta fundamental para combatirlo. A las personas con riesgo deben acercárseles cuanto antes medios para conseguir llevar esperanza a su vida. Las cosas no siempre son fáciles. Pero tampoco es tan difícil cambiar las cosas si la sociedad y las instituciones se implican.