Edificio Monja Etheria, 16
León, marzo de 1994. Carlos Muñiz Sánchez firma este edificio para la Promotora Leonesa de Viviendas en una parcela irregular del Polígono La Palomera, en la calle Monja Etheria c/v a San Juan de la Cruz, cuyas obras dirigió con Juan Martínez Guisasola como aparejador. Proyectó una estructura de hormigón sobre un sótano para aparcamientos e instalaciones generales. La planta baja retraída respecto a la línea de fachada, en curva, con los trasteros conformando un porche cubierto; la rampa del garaje pegada a la medianera y dos portales, uno por cada calle, ambos con escalera y ascensor para relacionar el sótano con cuatro plantas y 16 viviendas (2 por rellano y 8 por portal), una mitad orientadas a la calle con los servicios al patio, y la otra con las principales estancias exteriores; ambas distribuidas por un vestíbulo que separa las zonas «de noche» de las «de día». Dispuso la fachada de ladrillo visto, plana y en diente de sierra por Monja Etheria, y curva, revocada, fajeada y pintada en el resto, donde abrió vanos de varios tipos con carpintería metálica reticulada…
En la Memoria del Proyecto, leemos que «la curva dominante del solar condicionó desde el origen la imagen cilíndrica del edificio»… Huyendo del perfil funcionalista de la modernidad, y para enfatizar esa «imagen cilíndrica», Muñiz evitó consolidar la totalidad de la planta baja, abriendo un porche cuyos pilares destacan de modo preciso un insólito volumen cuyas fachadas curvas solo se quiebran por planos rectos en la transición con los edificios adyacentes, o en algunos puntos «buscando la lectura individualizada de ciertos espacios interiores»... El muro como hecho arquitectónico, como encuentro del interior y el exterior, o como elemento de transición entre lo público y lo privado. ¿Y el resultado?... Un edificio de silueta rotunda que combina espacios a la escala del peatón con elementos del repertorio minimalista. Frentes planos o en ángulo, subrayados por la geometría y realzados por una luminosa y colorista policromía, que sin duda actúan como referencia urbana… Venturi y «el refugio decorado». ¡Más y buena Arquitectura Postmoderna!