Sin perdón

S iempre me pregunté si el apóstol Santiago concederá el mismo perdón a todos los peregrinos habiendo entre ellos tantas diferencias y hasta clases. No hay que olvidar que en la Edad Media, en pleno furor compostelano, si a un pecador adinerado le imponían de penitencia hacer el Camino, podía pagar a otro para hacerlo por él, y santaspascuas, ya le traería a la vuelta el perdón. Ganar un jubileo es eso, « hacer las diligencias necesarias para conseguir las indulgencias correspondientes ». Y las diligencias que exigía Compostela eran un pitipiti fatigoso iniciado en Francia, los que más, o en cualquier otro punto de la Ruta, deduciéndose que, a más largo y penoso andar, mayor perdón para el concheiro y el morral de pecados que llevara. Y es que las preguntas tontas manan: ¿ganaba el mismo perdón el que partía desde París que el que salía de Astorga?... ¿no era ventajismo tramposo hacerlo a caballo, salvo que fuera el rocín al que de verdad absolvía el Apóstol?... y los que pedalean ¿pierden la mitad del jubileo y se lo lleva merecidamente la bici?... ¿se le absuelve igual al que duerme en albergues de diosnoslibre que al que zampa y se espatarra en hotelito?... y el que pernocta a la intemperie, bajo alero o en establo ¿gana más puntos?... y los que van sin mochila ni peso que fatigue su promesa -sólo botellita-, por haber hoy furgoneteros que negocian su transporte, ¿les descuentan indulgencias por cada kilo burlado?...

¿Y qué dice el Apóstol viendo a tantos que no hacen el Camino por razón de fe, sino en plan trial agnóstico, trekking ateo, footing ni fu ni fa o senderismo ligoncete, saliéndoles además vacación bien barata y muy saludable?, ¿qué hace?, ¿pasa de perdonarles y discretamente les maldice o les imputa?, pues si es conocedor de la complejísima política penitencial y de indulgencias que de antiguo estableció Roma ( Roma locuta, causa finita ), creo que todos esos se quedan sin perdón como yo sin abuela y, además, en su «compostela virtual» les estampan todos sus pecados (y uno más) para que se enteren de una vez de lo que vale una concha.