Y este cuento...
L a última producción de la factoría para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico alumbró esta semana el cuento de que «la experiencia española con el carbón es ejemplo en el mundo». El relato, vestido en formato vídeo, con participación de supuestos expertos internacionales, imágenes aéreas de cortas a cielo abierto y música con reminiscencias de Informe Semanal para darle credibilidad, exporta ya redes sociales adelante el logro sin advertir de que la ficción lo contamina. Sin vergüenza, ni sonrojo, el ministerio se vanagloria de una «estrategia» fantástica ideada por los sindicatos para que «los trabajadores no se queden atrás» y en la que se busca «cubrir objetivos de justicia social, de avance económico y de inclusión social». No me negarán que el argumento engancha. Cualquiera lo compraría. Cualquiera salvo que hubiese conocido las cuencas mineras leonesas, sepa su estado actual y tenga un mínimo de pensamiento crítico para discernir entre la propaganda política y la realidad. ¿A quién va usted a creer: a los publicistas ministeriales o a sus propios ojos? ¿No ven los empleos, como esas limosnas con las que la empresa estatal Tragsa explota a los exmineros de Tormaleo y Cerredo? ¿No aprecian las oportunidades que acechan detrás de cada parque fotovoltaico y cada cordillera de molinos eólicos, de cada fábrica de reciclaje de baterías eléctricas, proyectos promovidos en algunos casos por los mismos patrones mineros que se enriquecieron con las subvenciones? ¿No entienden que ese vacío que se abre delante de sus pies, ese desierto demográfico tan poco valorado, se justifica por la ocasión de negocio que explotarán las grandes firmas para asentar sus inversiones por encima de los recursos naturales sin dejar beneficio aquí? ¿No se dan cuenta de que la nueva Baviera se alienta bajo los escombros de los pozos de Sabero, los rescoldos del valle de Gordón y la decadencia de Laciana y el Bierzo?
La experiencia española con el carbón es ejemplo en el mundo. La experiencia española con el carbón es ejemplo en el mundo. La experiencia española con el carbón es ejemplo en el mundo. Si todavía no se lo creen, copienlo otra vez o vuelvan a ver el vídeo del ministerio ese que tiene más letras que Pola de Gordón vecinos. Para una vez que nos ponen de ejemplo resulta que este cuento se acabó.