TRIBUNA
Terrorismo y muerte en Barbate
E l 14 de abril de 1931 se proclama la II República y el rey Alfonso XIII tiene que marchar al destierro. Las masas populares, auspiciadas por las organizaciones sindicales y, apoyadas por los líderes de izquierda, culparon a la Iglesia y a las órdenes religiosas de todos los males como entes privilegiados, durante la monarquía. Los desórdenes callejeros abocaron en una guerra contra todo aquello que oliera a religión, a Iglesia, a conventos, a órdenes religiosas, a monjas y a frailes. ¡A por ellos! El 11 de mayo de 1931 se inicia la quema de conventos y de colegios de instituciones religiosas. Se iniciaba el odio hacia la religión. Ante tales hechos el Gobierno, presidido por Miguel Maura, planteó la necesidad de sacar a la guardia civil, si se repetían los hechos. Eso no, exclamó Manuel Azaña. Todos los conventos de Madrid no valen la vida de un republicano. He dicho que me opongo a ello, decididamente, y no continuaré un minuto en el Gobierno si hay un solo herido en Madrid por esa estupidez.
En 1959 se funda ETA. Fue un clan de gánsteres, de mercaderes a sueldo, que, a mano armada, secuestraban a los empresarios que daban de comer al pueblo vasco y los mismos obreros traicionaban al patrón para comunicar a los pistoleros cuando iba y salía de trabajar para asestar el golpe de gracia. Llevarlos a un zulo. Reclamar millones de las antiguas pesetas o de euros y el que se negaba, la despedida era el tiro en la nuca. Se calcula que la suma de las extorsiones ascendió a 447 millones de euros entre 1967 y 2010. En algún momento, dejó de secuestrar, afirmando que ya tenía cubiertas sus necesidades económicas.
Detrás de ETA, llegó el Grapo, el FRAP, Terra Lliure, organizaciones terroristas que regaron de sangre inocente la tierra de Iberia, quienes decían representar a un estado opresor. Del FRAP era militante el padre de Pablo Iglesias. En una interpelación parlamentaria Cayetana Álvarez de Toledo dijo que Pablo Iglesias era hijo de un terrorista. No lo negó. Fue demandada. El juez archivó el caso.
Hoy, en el siglo XXI, ETA está disfrazada por la marca Bildu con quien el presidente del Gobierno ha pactado un matrimonio cuyo fruto es el poder. Terra Lliure se diluyó entre la CUP y los independentistas. Y el resto de las organizaciones están solapadas bajo signos de partidos marxistas leninistas cuyos restos sobreviven y viven muy bien en los gobiernos.
El terrorismo sigue. Sí, hay mucho gansterismo. El Alcapone, el bandolero de Chicago, hace unos años, ha llegado a España. Está presente. Hay muchas formas de terrorismo. El de las pistolas puede ser que esté en paro, pero, el de ir quemando el territorio patrio, un día sí y otro también, por ocupar el pedestal del poder, ese no ha desaparecido. Es el terrorismo de los sátrapas. Que no derrama sangre. Derrama miseria. Es el terrorismo que vende al estado, a la patria y traiciona todos los principios éticos, morales y constitucionales.
Y, ahora, hay otro terrorismo. Allá, en el sur de Andalucía, en esa localidad gaditana de Barbate donde los nuevos terroristas del narcotráfico campean con sus motoras, con sus tanques acuáticos y se enfrentan a las fuerzas de orden público, equipadas con unos botes de goma. En una de tantas persecuciones contra los narcotraficantes, una lancha suicida enviste a la guardia civil. Mueren dos, y otros salen heridos.
ETA cometió tres mil quinientos atentados. Ocasionó siete mil víctimas, de las que 850 fueron muertes, incluyendo a veintidós niños.
El Grapo asesinó a 93 miembros del orden público y ciudadanos normales, entre ellos, a Publio Cordón, que no se sabe dónde está. Animo a los de la Memoria Histórica que traten de buscar sus restos ya que tienen suculentas subvenciones. No lo harán. Esta muerte no vale nada.
El FRAP asesinó, por la espalda, a seis policías nacionales. Terra LIiure también dejó su rastro de dolor y miseria. Que se lo pregunten a Federico Jiménez Losantos que tiene secuelas en una pierna. Con toda esta tropa ha establecido Pedro I, el Mentiroso, matrimonios polígamos.
Para el gobierno español se ha demostrado que la vida de los servidores del orden público: guardias civiles, la de los policías nacionales, de las fuerzas armadas, vale menos que la Presidencia del Gobierno.
Estamos ante la mayor ignominia. Estamos ante un Gobierno que solo piensa en mantenerse en el poder. Nos encontramos a un presidente que, mientras mueren los defensores del Estado acude a fiestas, a desfiles de modelos. Sí, estamos ante un presidente que, en sus sentimientos, solo cabe: el poder. Al enfermo, hay que alimentarlo y darle la medicina que alivie o cure su enfermedad. Es el narcótico del drogadicto. Tiene que esnifar todos los días el polvo que le activa su cerebro para mantener la vitalidad, la fuerza.
Al Gobierno actual, repito, no le importan las vidas del servidor público porque han jurado hasta derramar la última gota de sangre. Ya sabían que vestir un uniforme incluía el riesgo y sacrificio por la patria. Sí, han jurado ser masacrados por los CDR, en Barcelona y no responder a los nuevos terroristas porque se enoja el señor de los anillos. Sí, han jurado perseguir a los narcotraficantes y morir, si es necesario, ya que es su deber. Sí, han jurado servir a la patria para que los traidores ocupen el pedestal y sean coronados por los independentistas y terroristas.
El ministro del Interior Marlaska, antiguo perseguidor de etarras y hoy fiel servidor del señor feudal de la Moncloa hizo aquel juramento: Prometo, por mi conciencia y honor, cumplir fielmente con las obligaciones del cargo de ministro/a de, con lealtad al rey, y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado. Sí, has jurado defender al estado que supone defender a tus súbditos, a tus guardias civiles, a los miembros de las fuerzas armadas ¿Para qué sirve tu juramento? Tu juramento se anula si enojas al gran señor ¿Sabes qué acuerdos tiene tu jefe con el moro? También has jurado proveerles de medios para enfrentarse al enemigo. No ganaremos nunca la guerra si el contrario nos ataca con una pistola y nosotros hacemos frente con guijarros.
Marruecos dedica al cultivo del hachís cincuenta y siete mil hectáreas. De ello, viven 90.000 familias. Marruecos tiene que exportar “sus diamantes”. Europa es el principal cliente y la ruta hacia Europa es el Sur de España y Gibraltar ¿Hay acuerdos comerciales o se hace la vista gorda? ¿Me gustaría saber qué noviazgo y matrimonio estableció Pedro con su colega marroquí, el rey Mohamed? ¿Es a cambio de no reclamar las plazas de soberanía de Ceuta y Melilla? Puede ser, más otros, que ignoramos.
Da escalofríos ver el desprecio de Sánchez y el PSOE a los guardias asesinados. EL Parlamento catalán no guardó un minuto de silencio por las muertes de dos servidores del orden público porque el Partido ´Socialista Catalán se unió a la traición de los independentistas.
Presidente, ministros, volviendo a las palabras de Manuel Azaña. Ahora no se asesina ni se tortura a religiosos ni se queman conventos, se mata a guardias civiles y todos los muertos, fruto del gansterismo de ETA, de Grapo, los del FRAP, los de Terra Lliure y la de los dos últimos guardias civiles asesinados, todos, valen menos que ese poder que un presidente firmó con todos los enemigos de España.
Yo no sé si los españoles convertimos el pasotismo en santo y seña de esta sociedad. Yo no sé si estamos anestesiados y narcotizados por los medios y lo único que sé que este país es un barco a la deriva y si se hunde lo único que hemos hecho es poner botes salvavidas a los gobernantes. A esos que les importa un bledo que el terrorismo haya provocado la muerte de dos aguerridos soldados y dos viudas y unos hijos estén llenos de sollozos porque un marido y un padre fueron víctimas de la inoperancia de un gobierno que no pone los medios para que las fuerzas del orden público luchen contra un enemigo, cuyas víctimas valen menos que ocupar la presidencia por traición.
El terrorismo y la muerte en Barbate no serán los últimos. Si para el presidente del Gobierno miles de víctimas no fueron causa para impedir su matrimonio con terroristas, independentistas, menos, la muerte de dos servidores a España.