Lo que no nos cuentan
El crecimiento de la economía está íntimamente ligado al sector público. Esta semana, un ufano ministro de Economía sacaba pecho de los datos dados a conocer por el INE sobre el comportamiento del PIB en 2023. Sin embargo, una visión menos interesada y objetiva de los mismos nos lleva a la conclusión de que el crecimiento hay que buscarlo en el gasto público y en las exportaciones. De hecho, desde que gobierna Pedro Sánchez ha crecido más el sector público que el sector privado. Una anomalía para un país moderno, dinámico y con empresas solventes creadoras de valor añadido, que invierten y crean empleo. Una de estas variables que comentamos es la inversión y si nos referimos a la extranjera sólo el año pasado cayó casi un 20%.
El Gobierno sigue gastando por encima de nuestras posibilidades y endeudándonos por generaciones. Este reproche ha venido incluso desde Bruselas esta misma semana.. Mientras, las familias siguen soportando la carga de la inflación. Aún en marzo, el IPC ha seguido subiendo y ya acumula en algo más de 2 años un 17% mientras que los salarios no lo han hecho en la misma proporción mermando la capacidad de compra de los hogares. Tampoco han sentido un alivio las hipotecas, ni los alquileres, ni el recibo de la luz ni en breve el del gas, cuyo IVA también aumentará hasta el 21%. Muy al contrario, el Gobierno sigue penalizando a los sueldos medios y altos con mayores pagos en cotizaciones a la Seguridad Social. Eso sí, apenas al 12% de las pymes les ha llegado un euro de los fondos europeos.
No parece que al Gobierno le preocupe no contar con presupuestos, pero tampoco las advertencias de la UE. Sigue gastando y más que lo hará cuando necesite a sus socios en próximas votaciones. Dijo el martes el ministro Bolaños que tienen la intención de aprobar esta legislatura unas 200 leyes. Será a nuestra costa.