Meloni agrega derechos
Giorgia Meloni se definió como una «mujer, una madre y una cristiana». Bien. También dijo que no pensaba revocar la ley del aborto, de 1978. Aunque más del 60% de los ginecólogos son objetores. Sí pretende «dar el derecho a las mujeres que piensan que el aborto es la única opción que tienen a tomar una decisión diferente».
Su Gobierno impulsa financiar con fondos europeos a los grupos provida. Y pretende ponerles un chiringuito en el interior de las clínicas.
No es que puedan dar por saco y rezar fuera, que también es molesto. Los meten en la clínica. Como los interventores en las elecciones.
Como un ejército de salvación con campanas (y se acabó) pero sin la preciosa cara de Jean Simmons a punto de caer en los brazos de Marlon Brando.
El aborto no es un derecho, ni siquiera en Francia se ha reconocido así en la Constitución, sino como libertad garantizada.
Giorgia Meloni llama a esto (a la posibilidad de elegir una alternativa) agregar derechos.