Peaje asturleonés

La invocación a los peajes abre una puerta en León que da paso a los demonios que habitan en el inconsciente de la provincia. Los peajes, como recoge el diccionario, definen un «derecho de tránsito» que se negó a esta tierra al gravar las comunicaciones para vedar, por un lado, su conexión vital con los puertos del Principado de Asturias, la unión natural de los leoneses y, por otro, estrangular la conexión hacia Galicia por la senda por la que los arrieros maragatos hicieron fortuna. Pero los cepos, que estrangulan el desarrollo leonés al imponerle una factura adicional a los productos, sobre todo sintetizan la relación de los leoneses con los partidos y las administraciones superiores. La desconfianza, la traición que incluso se advierte, queda a la vista como en ningún otro proyecto en ese momento del año 2000 en el que el Gobierno del PP prorrogó la concesión durante 29 anualidades más, hasta 2050, en lugar de vencer en 2021. Con todo firmado, apenas tres años después, el entonces candidato del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se subió al escenario de un mitin en Eras de Renueva para prometer la eliminación de las barreras, aunque ya sabía que la factura adicional le daría una coartada en la que justificarse si llegaba al poder. El peaje sigue ahí, pero ahora sabemos que no sólo se trata de una ignominia, sino que se hizo de manera ilegal, sin que ninguna las formaciones políticas haya hecho nada en todo este tiempo por remediar la condena y disculparse por el engaño.

La sentencia viene de Europa y responde a la denuncia presentada por los exdiputados asturianos que Podemos expulsó dentro de su haraquiri político. La Comisión Europea dictamina la ilegalidad del procedimiento seguido para aplicar la obra por parte del Gobierno de Aznar, que justificó entonces la medida en que abarataría el coste. No sólo no lo ha hecho, sino que la autopista del Luna se alza entre las más caras de España, mientras la concesionaria de la autopista asturleonesa se garantizaba una caja de más de 1.950 millones de euros en los años de ampliación. El Ejecutivo del PSOE debe decidir ahora si alega contra el fallo, lo que respaldaría de facto la decisión que tomaron en su día los populares, o se aviene a lo que marca la institución comunitaria en vista de que puede que al final se vea obligada. El peaje a León le ha salido ya muy caro.