Diario de León

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Demoledor mañana: dentro de 15 años el 41,8% de los hogares de León y Castilla alojará a una sola persona. Y sólo hablará con las paredes, con su gato o se llamará a sí misma en alto por ver si se encuentra. Desolador. Lo dice la perspectiva demográfica del INE a 50 años vista. Van detrás Asturias, Galicia y Extremadura componiendo la España que mengua despoblándose y, por tanto, empobreciéndose, aviejándose y sin que los emigrantes que puedan llegar alivien la cruda realidad; porque vendrán, se necesitarán a espuertas y les llamaremos desesperadamente como ocurre en la flota pesquera gallega donde el 40% de la marinería ya es inmigrante; de no ser así, la mitad de los barcos amarrarían. Vendrán, habrán de venir, pero elegirán las zonas españolas más pobladas donde el empleo es fiel. Aquí sólo encontrarán un horizonte: cuidar viejos, poco plan.

Nidos vacíos con urracas viejas. El silencio será entonces el rey de la casa. ¿Dónde los hijos y los nietos? ¿Merece la pena un hogar para una sola persona?. ¿Merece una persona vivir sola en un hogar? ¿Por qué no se juntan dos o tres o cuatro espantando así la muerte que ronda al solitario y aliviando dineros al compartir gastos, ayudándose y huyendo de ese comer solos que hace amarga la sopa y estopa el guiso? ¿Debe esto considerarse utopía y resignarnos a esta fatalidad que antes no se veía con tantísima crudeza? ¿Qué familia es una sola gente y, en el mejor de los casos, con un extranjero que le cuida, le visita o le pasea?... Lo cierto, y hoy más que nunca, es que la gente mayor casa mal; y sus pensiones, peor. Muchas manías irrenunciables a esos años. Muy celosos de lo suyo, sea poco, algo o nada. ¡Y como la casina de uno!... A esas edades sólo se cultiva la poca fe, la rozadura y la rabia cascada. Además, «moro viejo no aprende lenguas». ¡Cuánta tristeza en lontananza!... Confiemos en que la realidad sea escarmiento y que mancomunar se convierta a la fuerza en refugio y medicina... o vivir para acabar así no habrá merecido la pena. ¿Dónde se fue el amor de los propios y que de lejos tampoco llega?...

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