¿Godello de dónde?
En contra de las enseñanzas de nuestros padres, vamos a tener que incumplir la norma que nos recomendaba no comer con los ojos. Mucho menos beber, y eso supone un peligro mucho mayor, como acabamos de comprobar esta semana con la apuesta de la Denominación de Origen (DO) Rueda para incluir dentro de sus variedades secundarias la uva godello: el tesoro que desde hace décadas miman en los viñedos del Bierzo y en las terrazas de O Barco de Valdeorras que el Sil deja a mano izquierda camino de arramar su manantial babiano en las ansias del Miño. Ahí, en ese paisaje minifundista que condiciona el cultivo y su cuidado, se enraíza el carácter de un fruto que pierde su esencia en el esquema de producción castellano. No vale todo, como claman los bodegueros bercianos y gallegos, temerosos de que se desvirtúe la autenticidad que les identifica por el capricho de adornar una etiqueta extraña con el reclamo del nombre que han puesto de moda cosecha a cosecha. No sabe igual, como defienden los productores, que deberán vencer la porfía avalada por el Itacyl, una de las herramientas, junto al Somacyl, ya conocen el estribillo, con las que la Junta teje su administración en b para solventar sin remilgos sus encomiendas delicadas.
El movimiento mercantilista para usufructuar al godello sigue la estela de las bodegas castellanas que han empezado a vender sus blancos con las letras en grande de Albarín, pese a que sus vinos no tienen nada que ver con la esmerada producción lograda por los blancos de la DO León después de años de vencer, incluso en casa, la inercia competencial del verdejo. La identidad no se compra, ni se vende, aunque la Junta reincida en sus esfuerzos por amalgamarlo todo, por uniformar la personalidad propia de quienes han levantado un sello en la selva de los escaparates del mercado. La estrategia avanza en su empeño por aprovecharse del trabajo de los productores leoneses va los que oculta bajo el paraguas fagocitador del corazón amarillo de Sabor a Tierra, con el gancho de las ayudas y las promociones conjuntas como chantaje, para que hagan sombra al marchamo de Productos de León: las 16 figuras de calidad que defienden un pilar de desarrollo leonés propio. Que no les engañen. Abran los ojos. Sólo nos faltaba tener que beber lo que ellos quieran.