Osos sin medicina
Los chavales que se han criado en León durante las últimas décadas saben perfectamente quiénes son Luna y Ponderoso. En sus visitas al Coto Escolar han tenido la singular oportunidad de ver de cerca a esos dos osos. Ella, más joven, autóctona y de menor tamaño. Él, con raíces centroeuropeas, ha sido considerado el ejemplar más grande que vive en cautividad. Lleva allí 33 años, cuando llegó con apenas seis meses. Ha transcurrido tanto tiempo que se entremezclan datos y leyendas para concretar su origen. En la hemeroteca del Diario figuran noticias que contradicen las versiones pseudo oficiales. Luna fue comprada por el Ayuntamiento leonés, y Ponderoso llegó desde Valladolid, cuando allá por 1991 el Coto aspiraba a tener un zoológico que fuese sucursal —literal— del de pucela.
Poco después se agudizó la polémica sobre la vida de animales en cautividad. En una de las ocasiones en las que Luna y Ponderoso han copado espacios en los debates públicos surgió la idea de crear un cerco apropiado en el entorno de Riaño, como los que hay en Asturias, para evitar que vivan en apenas 600 metros cuadrados. La solución para avanzar hacia la inacción fue de auténtico ejercicio de diplomacia vaticana. Que los municipios interesados de la montaña se pusiesen de acuerdo sobre el lugar y la Junta pagaba los gastos. Fue el mejor camino para no tener que hacer nada. Así hasta hoy.
Recordaba la ya vejez de Luna y Ponderoso observando el trilerismo que envuelve todo lo relacionado con las facultades de Medicina. El avispero es de los buenos. León y Burgos se cargan de razones para pedir una nueva, Valladolid y Salamanca reclaman que no se desperdiguen esfuerzos... La cosa pinta fea. Quizá podría aventurarse la hoja de ruta. La artimaña de Mañueco se está fraguando. Eso de lograr el consenso para las nuevas titulaciones en este asunto es como lo de crear la jaula osera. Pensar que alguien va a ceder y regresar a casa condenado al patíbulo social es impensable. Asunto distinto es qué se debería hacer siendo rigurosos. Eso no interesa a nadie.
En la autonomía existe otra experiencia. A cuenta de su capital. Decir a estas alturas que no tiene es quijotesco. La evidencia es clamorosa. Y eso que las sedes se iban a concretar por consenso...
Luna y Ponderoso morirán en La Lastra. Y nos quedan horas y horas viendo cirugía fina política a cuenta de Medicina... Va, tocamos la misma, pero con un poco más de bombo...