Con un lobo medio lleno o medio vacío

Conocido es que las estadísticas son como las ferias. Cada uno lo cuenta según le ha ido en ellas. Algo de eso se produjo ayer al conocer el balance sobre la evolución del lobo en la Comunidad. La Junta destaca que el número de ejemplares se incrementa en un 10% en una década. Un número que resulta para los conservacionistas totalmente insuficiente. Pero quizá olvidan que hasta anteayer defendían a capa y espada que la especie perdía individuos constantemente. El problema que tiene es que se ha convertido en un elemento de batalla política y de, algún modo, ideológica. Lejos de buscar criterios científicos se le mete de lleno en una batalla que impide objetivar el asunto.