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ASUN JIMÉNEZ COLÓN
León

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¿Todo vale para dar publicidad a un nuevo negocio? He notado, que últimamente, en mi población, están abriéndose nuevos negocios de diferentes estilos: gimnasios, tiendas, relacionados con la hostelería, etc. El hecho de que muchas personas hayan perdido sus puestos de trabajo hace que con el dinero obtenido de los finiquitos surjan nuevos emprendedores, el pequeño empresario que al final y a la postre es el que le da vida al país. Me cuento entre ellos, en mi proyecto de futuro cercano, está abrir una pequeña cafetería. Ilusionada, y con todos los miedos que conllevan emprender una aventura en la que sabes que está en juego la perdida de una inversión y de un esfuerzo. Imagino de qué manera hacer que funcione y qué es lo que mejor aceptación va a tener entre los posibles clientes de la zona, con mucha ilusión y ganas de verla funcionar ya. Pues bien, entre tanto pensar qué sería lo más atrayente, nunca se me ha pasado por la cabeza lo que he visto hoy en la prensa, "La subasta de una chica entre los nuevos clientes" en la inauguración de un bar de copas. Ya no hablo de técnicas de venta ni de llamar la atención, ya hablo de ganado, sí, estamos tratando con ganado y de quien se deja tratar como si fuera carne en el expositor de un supermercado. No entiendo como aún en el siglo que estamos haya mujeres que se dejen utilizar de ese modo y de igual manera nos metan al sexo femenino en el mismo lote. Como mujer me imagino estar expuesta a que pujasen por mí como si de una vaca se tratara en la feria de ganado y degradante es la palabra que se me viene a la mente. La evolución de la especie ha quedado en ese aspecto un poco paralizada en la época del neandertal, allí garrota en mano y cogidas de los pelos se dejaban arrastrar las féminas del momento y algo parecido es lo que me viene a la mente cuando aún en el siglo XXI veo como algunas mujeres del momento dejan que hagan con su imagen y ya de paso con las de las demás. Sigue fallando la educación en ese sentido, aún nos queda mucho camino por recorrer, es una lástima. Pienso que las mujeres somos mucho más que un cuerpo por el que pujar como si de ganado se tratase. Pero para que nos respeten, debemos empezar por hacerlo nosotras mismas. Asun Jiménez Colón.

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