LAS BRUJAS
Las Brujas Todos tenemos una idea muy mala sobre las famosas brujas, que según el dicho gallego, "Haberlas haylas", no les quepa a ustedes la menor duda que estamos rodeados de brujas por todas partes. En la calle, en el trabajo, en las casas, en los supermercados, por todos sitios hay brujas. Pero estas no son como las que todos tenemos en la cabeza y que nos han inculcado desde pequeñitos. Aquellas que se dedicaban a trasladarse sentadas en una escoba o a invocar al demonio en los famosos aquelarres, bailando desnudas y haciendo no sé cuantas cosas malas según la inquisición de aquel tiempo. Este tribunal arrasaba con las sospechosas de brujería y a las primeras de cambio ya estaban confesando en el potro las atrocidades que hacían, pasando seguidamente a asarse a la parrilla en las famosas hogueras públicas. Tampoco me voy a referir a la cantidad de videntes y adivinadoras de futuro que han salido en los últimos años y que se están forrando con la cantidad de incautos que hay en este país. Ahora las brujas a las que me refiero no son tan malas, ni tan horrorosas como aquellas. Las brujas de ahora pueden estar a tu alrededor y no darte cuenta. Pueden ser compañeras de trabajo que te hacen faenitas sin que te enteres, algunas que crees que las tienes dominadas y las que te tienen dominadas son ellas a ti, las que valiéndose de sus encantos, te sacan hasta la cerilla de los oídos y ni siquiera te percatas, esas son las brujas a las que yo me refiero. De todas formas, afortunadamente todas las mujeres no son brujas, le tengo un gran respeto a la mujer, ya que las mujeres están presentes en nuestras vidas, y tenemos que compartir este mundo con ellas desde que nacemos hasta que lo abandonamos. No sé qué hubiera sido de mí sin la ayuda de las mujeres que han estado y están presentes en mi vida y que tanta ayuda me han prestado. De todos es sabido que la mujer es mucho más inteligente que el hombre, por lo menos eso creen la mayoría de ellas y su inteligencia se basa en hacer creer al hombre que el que tiene la autoridad y el mando es él, pero en realidad la que controla la situación en todo momento es ella. De todas formas, creo que la salsa de la vida está en este juego y en tratar de engañarnos mutuamente, convenciéndonos nosotros mismos de que nos hemos salido con la nuestra. A mí personalmente me encanta relacionarme con las brujas actuales y tratar de llevármelas a mi terreno, es más, cuanto mas bruja sea, más me gusta tratar de convencerla y de que crea que ella es la que se sale con la suya. Porque no hay mayor satisfacción de hacer creer a una bruja que se ha llevado el gato al agua contigo. Al final y como colofón a este escrito, me despido con una simpática cita de Gabriel García Márquez referente a la mujer y a su inteligencia: "En cada momento de mi vida hay una mujer que me lleva de la mano en las tinieblas de una realidad que las mujeres conocen mejor que los hombres y en las cuales se orientan mejor con menos luces". Como sé que alguna se puede molestar por lo de menos luces, la cita hay que tomarla en el sentido de que las mujeres son capaces de resolver problemas que el hombre ni huele y además con menos medios. Joaquín Tomás Fortunati Cendrero