Depresión y melancolía política

Oigo las ruedas de prensa del presidente del gobierno y del líder de la oposición y mi desesperanza y sensación de catástrofe llega a su nivel máximo. Para no caer en la pertinaz melancolía, ya no leía las páginas de la prensa donde se informa de la cuestión económica y de esta forma me mantenía felizmente desinformado o quizás desintoxicado y sumergido en la deliciosa ignorancia. Pero caí en la tentación de escuchar y después leer las declaraciones de estos dos bueno señores y pensé que estaba al borde de una depresión. El Sr. Zapatero habló en unos términos y dijo cosas que me llevaron a la inquietante conclusión de que nuestro presidente no ha vivido en España este último año o al menos ha vivido en una España que nada tiene que ver con la que yo he vivido. Por ello decidí que no podré votar a un ciudadano que no viva en mi pais. Respecto al Sr. Rajoy su cinismo y el constante intento de tomar al pueblo soberano como retrasado mental, es proverbial. Siguen criticando de forma contundente las medidas que este gobierno está tomando, cuando todos sabemos que coinciden al pie de la letra con el ideario del PP y por lo tanto de forma descarada van a por el poder caiga quien caiga, aunque los que caigan sean sus compatriotas. Me gustaría ver reunidos a todos los que rodeaban a Zapatero, cuando fue votado para presidente y le gritaban aquello de "¡Zapatero, no nos falles!". ¿Qué gritarían ahora?. Si lo que está haciendo le han forzarlo a hacerlo y no cree en ello, ¿por qué no lo explica claramente?.