España, un país en la ruina

Sr. Director España es un país en la ruina sin recursos propios, dependiente de la financiación exterior lo que hace crecer la deuda cada día, y al no haber sabido controlar el déficit, el empleo, la corrupción y la perdida de la marca Made in Spain, dedicándose a importar productos fabricados en países como: China, Taiwán, Polonia Rumania Bulgaria etc. España ha vivido por encima de sus posibilidades, gastando más de lo que ingresaba, y ahora el gobierno con más de cinco millones de parados, unos siete millones de trabajadores con sueldos inferiores a mil euros, un millón y medio de familias sin ningún ingreso, seis millones de pensionistas de los que casi la mitad cobran menos de mil euros y tres millones de funcionarios no puede hacer frente al gasto que supone, y necesita endeudarse aún más y aplicar recortes sociales a los ya empobrecidos ciudadanos. Se ha permitido el despilfarro en las Autonomías y Ayuntamientos, y que las entidades financieras no inviertan en España nuestro dinero, lo hacen en otros productos y países, además de recibir ayudas del gobierno para recuperar las perdidas contraídas por su mala gestión. La corrupción política se ha extendido por todo el país, Autonomías, ayuntamientos etc. son muchos los implicados, pocos los condenados y ninguno que haya devuelto el dinero sustraído, y es que la justicia no es igual para todos, y de ahí que sea necesaria una reforma del sistema judicial español, la justicia es tan injusta como obsoleta. A los empresarios, les diré que dejen de pensar solo en abaratar el despido y crear contratos basura. La activación económica la produce el consumo, y no los despidos baratos.