Editorial | Adif asestaría el golpe definitivo a León con Olmedo como referencia ferroviaria
A las malas noticias para la planificación logística y ferroviaria de León que han ido sucediéndose en los últimos años se suma ahora la que asesta el golpe definitivo las expectativas de recuperación de la capital —y por extensión de la provincia, con especial incidencia en El Bierzo— como referencia —que lo fue— del noroeste por su ubicación geográfica históricamente estratégica sobre el cuadrante peninsular del noroeste.
Los planes de Adif pasan por derivar a Olmedo esa referencia histórica y las consecuencias para León serán desastrosas si finalmente ese proyecto se ejecuta. Y todo apunta a que sí. La construcción de un bypass —la ya famosa U de Olmedo— de ocho kilómetros que permitirá desviar la circulación por la nueva línea de alta velocidad de Galicia hacia a Valladolid, sin necesidad de llegar a Medina del Campo, para continuar luego hacia el País Vasco y Cataluña supondría que León —y también Ponferrada— perdería todas sus opciones de canalizar el tráfico ferroviario transversal que históricamente lo ha fortalecido no sólo como lugar de paso, sino también por lo que eso supone en cuanto a servicios vinculados. Y entre ellos, y en primer lugar, los talleres ferroviarios. Pero también las posibilidades de su desarrollo logístico —la plataforma de Torneros dejaría de tener sentido—, ya que la solución a la que apunta Adif no sólo comprometería el tráfico de viajeros, sino su competitividad también en el de mercancías.
En esta situación es exigible al Gobierno, a través del ministerio que lo representa, explicaciones concretas sobre estas cuestiones. Y también sobre otras, como el efecto que tendría sobre el enlace con el Corredor Atlántico y la modernización necesaria de la línea hasta Ponferrada para superar las deficiencias históricas del Manzanal.