La sonrisa mordaz que reivindicaba a León
Día tras día, durante tres décadas, Juárez plasmó en su viñeta del Diario la actualidad de León y la provincia generando sonrisas y también cabreos. Su talento para el dibujo se plasmaba acompañado por una picardía que exhibía en cualquier contexto para sacar punta a todo tipo de asunto. Eso sí, con esa impronta reivindicativa por ese León con el que se implicaba por su inconformismo frente a la decadencia. Asuntos como la minería, la agricultura o los conflictos sociales llenaban de crudeza sus viñetas, a las que inundaba también de sentimiento cuando tocada mostrar solidaridad o cariño hacia personas con problemas o víctimas de algún suceso. A Juárez son incontables las personas y especialmente los colectivos que tienen pendientes favores por los efectos que tuvieron sus chistes del Diario. Pero también los que contaron con su apoyo para todo tipo de iniciativas, especialmente en el campo social o de trabajo con chavales. León, y su patria chica de La Virgen, tienen una deuda con un cronista que supo retratar como nadie a su paisanaje.