El lúpulo leonés, acorralado por los costes y las plagas
León es el gran productor de lúpulo a nivel nacional, y sus contratos con Hopsteiner en los últimos años parecían asegurar una estabilidad y tranquilidad en las cuentas de los agricultores. Sin embargo, el sector advierte de que el incremento de los costes energéticos y de insumos como los fertilizantes en los últimos años están dando al traste con la rentabilidad de las cosechas. Amenazadas además por las plagas, tras una primavera de intensas lluvias. Los agricultores no se libran tampoco de un problema generalizado en las empresas leonesas: no encuentran mano de obra cualificada (y el sector es intensivo en el trabajo manual) y no hay relevo generacional. De momento, sólo encuentran solución si los compradores pagan más por su producto. Y eso reclaman.