La trucha lleva vida a los pueblos
La situación de la pesca en la provincia de León ha registrado un giro de 180 grados con la implantación de las fórmulas sin muerte. El progresivo retroceso de ejemplares de los ríos, como ocurre en estos momentos con la llamada caza menor, se había convertido en un elemento desincentivador muy perverso, tanto para los propios aficionados locales como para las personas que históricamente viajaban a la provincia atraídas por sus afamados cauces bien provistos de ejemplares de truchas. La recuperación con las nuevas fórmulas más acordes con la realidad del medioambiente están siendo muy eficaces. Se recuperan los ejemplares y probablemente ahí resida esa nueva vitalidad que registra la pesca en la provincia, una actividad que cada año genera un volumen muy notable de actividad económica en el mundo rural, tan necesitado de fórmulas para retener población.