Impulso para la industria rural
La capacidad de atraer y retener empresas en el medio rural es, junto con una dotación de servicios públicos suficiente, la principal herramienta para frenar el avance de la despoblación. Y difícil tienen los pueblos conseguirlo si no cuentan con infraestructuras suficientes para el desarrollo de la actividad empresarial. Por eso ayudas como la que acaba de aprobar la Diputación provincial para 25 polígonos industriales repartidos en municipios de menos de 20.000 habitantes son fundamentales a la hora de incentivar la actividad económica y, con ella, la generación de empleo en los pueblos. Fijar población requiere el anclaje del trabajo, y los pequeños municipios tienen en las ayudas para dotar mejor a su suelo industrial una oportunidad importante con la que posicionar su oferta. La ayuda está ahí, ahora el trabajo corresponde a esos ayuntamientos.