Seguridad del propietario y de los vecinos
El problema de la okupación sigue sin recibir una respuesta adecuada por parte de las administraciones. Los propietarios sufren un daño directo sobre sus bienes, con situaciones singularmente conflictivas, como cuando una vivienda es arrebatada a personas vulnerables o a las que han dejado de residir por unos días y tienen en ella su hogar habitual. Pero, en todo caso, la okupación es un ataque a derechos básicos. Y también para quienes viven cerca, ya que en muchas ocasiones esa invasión del espacio físico va acompañada también de unos abusos en su entorno, con perjuicios en todo tipo de órdenes, incluida la propia seguridad que debe tener garantizar cualquier persona para circular por las calles. Ahora, existe otro caso conflictivo en el barrio del Crucero. Un nuevo foco que precisa una respuesta sin más dilaciones. La queja es conocida y cabe preguntarse la razón por la que no se atienden con más diligencia las quejas de los vecinos, que parecen condenados a padecer durante demasiado tiempo los abusos hasta que alguien actúa.
, Texto
+ Texto
G Texto