Descarrile en el San Froilán leonés
Los pendones y los carros engalanados son el principal símbolo de la fiesta más autóctona leonesa. Por San Froilán, el sabor de la morcilla se une a la recuperación de viejas estampas en las calles de León y de La Virgen del Camino con un desembarco de pendones, que cada año son más, y de esos carros que en la mañana del domingo, tras la Cantaderas, recorren el casco antiguo rememorando las raíces de esta tierra. Supone un lujo poder contemplar piezas tan cuidadas por parte de unas personas que llevan años reclamando al Ayuntamiento unas condiciones razonables para su desfile. Con seguridad y con menor castigo para los animales. Hartos de la falta de soluciones por parte del equipo de José Antonio Diez, este año han decidido no acudir. Su agrupación reúne a la mayoría y además son los más valiosos y llamativos. Los carros descarrilan este 2024 ante un gobierno municipal que tiene por costumbre no escuchar a casi nadie.