Leitariegos alcanza el nivel soñado largamente
Hay proyectos que encarnan una terrible contradicción. Acumulan una importancia mayúscula y unos retrasos más allá de toda lógica. Algo de esto sucede con la imprescindible mejora de las instalaciones de la estación de esquí Leitariegos-Valle de Laciana. En el fondo, exhibe ese abandono que sufren las cuencas mineras, que se hunden cada día que pasa un poco más en un pozo trazado entre las viejas escombreras y las promesas que nunca se hicieron realidad. La falta de oportunidades de la zona de Villablino plantea la necesidad de recurrir a sus recursos más autóctonos, al sector primario ganadero y a las posibilidades que facilita la naturaleza, como polo de atracción turística. La ‘nueva’ estación le permitirá llegar mejor a ese ‘mercado’ tan competitivo del esquí.