Demasiada velocidad

Y yo me pregunto, aunque ya sea tarde, si no se habrá concentrado demasiado esfuerzo en las líneas del AVE y en las autovías mientras se han dado por perdidas esas otras líneas secundarias (unas proyectadas en su día, otras semiconstruidas y luego abandonadas) que podrían haber creado esa red ferroviaria tupida que tanto se echa, y se echará de menos; aunque los trenes no fueran a velocidades de vértigo. Nuestros abuelos se calarían la boina estupefactos.