Enredabailes

D os años. Eso es lo que ha durado el proceso de fusión/integración desde aquel 6 de noviembre del 2008 en el que Óscar López y Juan Vicente Herrera se sentaron ante los medios para explicarlo. Dos años, que algunos han querido aprovechar para su beneficio o el de los cercanos. Dos años, en los que otros se han ido alejando de aquella propuesta inicial pactada por el PSOE y el PP, bajo el amparo de la Junta. Dos años, en los que se ha demostrado la debilidad de un Gobierno autonómico, al que una vez más la comunidad se le ha hecho grande en un tema trascendental. Dos años, en los que se ha podido comprobar que queda mucho camino para lograr el tan ansiado sentimiento de comunidad, pero que también han de servirles a algunos para descubrir que León no siempre busca romper ese sentimiento, aunque no lo tenga. La fusión entre Caja España y Caja Duero es el camino y la demostración de que León, más allá del lenguaje de algunos políticos, sí hace Comunidad. Y eso, pese a los enredabailes, una figura muy leonesa, que lo que buscan es que todos bailen al son que ellos tocan.

El último en aparecer ha sido el secretario general de Asaja en Castilla y León, José Antonio Turrado, que ha querido enredar el proceso de fusión casi al final con un recurso contra los acuerdos del primer consejo de adminstración tras la aprobación de la fusión y, más concretamente, contra la comisión delegada o ejecutiva, porque alguno de los que en ella se sientan son «políticos». Habría que preguntarle a Turrado por qué presenta el recurso el día 27, un día antes de la celebración de la asamblea, cuando el consejo del que habla es del 1 de octubre. ¿Quizás estuvo negociando su entrada en esa comisión y no lo consiguió? Porque lo que no ha dicho Turrado es que él lo que quería era ser una de las 14 personas de esa comisión. Asaja sólo cuenta con ocho miembros, cuatro de Salamanca y León, respectivamente, en la asamblea general y, pese a esa escasa representación, tiene dos representantes, uno de ellos Turrado, sentados en consejo de la caja fusionada.

Es de desear que, una vez cerrada y sellada la fusión, los enredabailes pasen a la reserva, pero ya verán como hoy, en el consejo extraordinario que nombrará nuevo presidente a Evaristo del Canto, alguno querrá enredar para dejar claro que él baila aunque su música no suene o desafine.