Carbón: un protagonismo ineludible
La Junta no aceptará ser un convidado de piedra en la comisión de seguimiento del Plan del Carbón ni en cuanto concierna al proceso que se ha abierto tras la decisión de Bruselas de mantener el régimen de ayudas hasta el 2018. Este sería el mensaje que dejó claro el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, durante su entrevista con el ministro de Industria, Miguel Sebastián. Un encuentro que se ha hecho esperar demasiado a pesar de que las últimas decisiones que se han adoptado afectan a la misma supervivencia del sector minero.
Herrera, al que acompañaba el consejero Tomas Villanueva, también insistió en un aspecto para el que reclamó el apoyo del Ministerio: conseguir que se excluya del nuevo reglamento de ayudas (cuyo horizonte concluye definitivamente el 2018) la obligación de devolver las ayudas en el caso de que continúe la actividad. Aunque la situación del sector es crítica, la patronal minera mantiene que -siempre que se salga rápidamente de la situación de impasse originada por los recursos de las eléctricas- puede haber un porcentaje significativo de minas (se ha hablado del 30%) que podrían alcanzar en el 2018 el umbral de rentabilidad que exige Bruselas. El compromiso del ministro Sebastián de adelantar «de forma inmediata» las ayudas al funcionamiento correspondientes al 2011 puede ser un alivio para las mineras.
La Junta parece haber hecho suyo el planteamiento de la patronal y de ahí que pida la complicidad del Ministerio para seleccionar a las empresas potencialmente viables y presionar a las autoridades comunitarias.
La reunión de ayer servirá para que Herrera no acuda con las manos demasiado vacías a la cumbre del PP que hoy y mañana reúne en León a la plana mayor del partido. Ahí estará también el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que hizo causa común con las eléctricas en contra de las ayudas al carbón lo que ha derivado en una situación insostenible. Una posición que Tomás Villanueva calificó ayer de «incomprensible». Será interesante escuchar en León las explicaciones de Feijóo.