El botellón, asignatura pendiente

Las denuncias por consumo de alcohol por los menores, que siguieron el pasado año una tendencia ascendente (lo mismo que el consumo de drogas), constituye una de las asignaturas pendientes del grupo Paidós de la Policía Local que durante 2010 cursaron 130 denuncias a menores por consumir bebidas alcohólicas en la calle, léase -botellón-. Se trata, no obstante, de la excepción a un balance que, en términos generales, debe calificarse de satisfactorio y avala la trayectoria de este grupo integrado por nueve agentes. La experiencia acumulada desde la reciente puesta en marcha del grupo, -junio del 2008-, ha permitido mejorar la estrategia y centrarse en labores preventivas. Especial trascendencia tiene la labor en el entorno de los centros escolares, donde se concentran las áreas más conflictivas, y el creciente y fructífero contacto con los padres y los profesores lo que ha permitido disminuir significativamente el absentismo escolar. También cabe hablar de eficacia en el control de los miembros de un sector muy escurridizo: el de los grafiteros. Siete de ellos, identificados y denunciados, serían los autores de más de 3.000 pintadas en la ciudad. Un acierto en suma la creación de este grupo que ya se toma como referencia en no pocas ciudades españolas.