El insólito caso de los sobresueldos

Se hablaba en esta misma página, el pasado miércoles, del incomprensible limbo legal que se puso al descubierto tras difundirse la investigación abierta por la Junta para determinar si se habían producido casos de sobresueldos entre funcionarios de la Administración autonómica que son al mismo tiempo cargos electos. La publicación de estos datos ha causado el lógico estupor entre la opinión pública pero está claro que todavía no se ha rebasado el listón del asombro.

De insólito cabe calificar que la propia Junta haya reconocido posteriormente que una ley del Estado, -que entró en vigor nada menos que en diciembre del año 2000 y que modificaba diversos aspectos de la Ley de Incompatibilidades-, venía a derogar de hecho la normativa autonómica cuyo supuesto incumplimiento fue el origen de la investigación que afectaba a decenas de personas en las que coinciden ambas condiciones: la de cargo electo y la de funcionario de la Junta.

No se sabe muy bien qué es lo más grave: que haya tenido que mediar la denuncia de un particular para empezar a revisar estas situaciones por considerarlas irregulares o que en once años nadie en la Junta se hubiera apercibido de que se estaba aplicando una normativa sin efecto. Al menos, el consejero portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, ha tenido la gallardía (otros responsables más directos no lo hicieron) de no escurrir el bulto y salir a la palestra para reconocer el fiasco lo que no quita trascendencia al fondo de la cuestión que no es otro que la incomprensible dejación de responsabilidades que se ha producido, siendo la primera el conocimiento y aplicación de las leyes.

A más abundamiento de asombros, también se ha hecho evidente que la base de datos de la Junta, sobre la que se trabajaba para la citada investigación y sobre la que se basaron las informaciones de este periódico, no es correcta al aparecer en ella algunas personas que son funcionarios pero no de la Junta sino del Estado. Se desconoce si la Junta tomará nota de esta lamentable experiencia... para no repetirla.