EL GALLO
Los papones también lloran
La lluvia está jugando una mala pasada a la Semana Santa en todo el país. Son frecuentes estos días las imágenes de los cofrades sevillanos llorando desconsolados porque ha sido imposible la procesión a la que dedican tantos desvelos. Pero no sólo ocurre eso en Sevilla. En León, la lluvia frustró las esperanzas de los papones de la Cofradía La Agonía del Señor, organizadora de la procesión Jesús Camino del Calvario. Y ocurrió lo mismo con la procesión de la Amargura que organiza cada año la Cofradía de Minera y Vera Cruz. Y con la procesión del Silencio que debería haber salido de los Capuchinos... Era para ver la desolación de los papones que, después de todo un año, preparando con esmero cada detalle del desfile, veían con desesperación que la copiosa lluvia caída ayer tarde deshacía todas sus ilusiones. Sí, los papones también lloran.