San Marcos, adelante pese a la crisis

El PSOE contaba con la reforma y ampliación del Parador de San Marcos para sumarla al paquete de los proyectos que podía vender a los electores justo antes de las elecciones del 22 de mayo; pero las previsiones se toparon con la cruda realidad económica y ya el pasado mes de febrero se reconocía que la reforma se retrasaba al segundo semestre del año.

Justo cuando se cumple un año de la presentación del macroproyecto que persigue convertir el Parador de San Marcos en uno de los mejores hoteles del mundo, el presidente de Paradores, el leonés Miguel Martínez, ha reiterado que los planes siguen su curso y asegura que las obras podrán comenzar en el segundo semestre como se había anunciado. Es inevitable, en todo caso, un cierto grado de escepticismo si se tiene en cuenta que, -"al margen de que la situación económica general siga siendo más que comprometida-", el proyecto está todavía en una fase muy inicial de tramitación de las preceptivas licencias municipales. Y después deberán abordarse las fases de licitación y adjudicación que ocuparán un tiempo no pequeño. No puede perderse de vista que estamos hablando de una actuación de gran envergadura con una inversión que ronda los 42 millones de euros.

Sea como fuere tranquiliza que se haya ratificado ese compromiso contra viento y marea y habrá que convenir que se trataría de un mal menor si finalmente se da el caso de que el proyecto se retrasa algunos meses sobre estas previsiones. Lo que sí cabe exigir es la máxima claridad para evitar vaivenes y mensajes contradictorios. Lo esencial, en suma, es que León no pierda esta oportunidad que, sin lugar a dudas, reforzará en cantidad y en calidad su oferta hotelera y contribuirá a afianzar la vocación ineludible de León como ciudad de servicios. Ahí está el futuro Palacio de Congresos y la llegada del AVE, con todo lo que conlleva, para ir redondeando una realidad que tiene que abrir puertas al desarrollo social y económico de León