Las Cabezadas merecen el título de nacional

Es una tradición y merece ser cuidada y mantenida. Pero, además, Las Cabezadas es una fiesta distinta por su singularidad. Una fiesta en la que se enfrentan el pueblo y la iglesia, los poderes políticos y los eclesiásticos. Y un año más, y ya van 853, no ha habido acuerdo alguno. Si es foro u oferta la ofrenda que realiza el Ayuntamiento de León al Cabildo Isidoriano queda pendiente de nuevo y no se sabrá hasta el próximo año. Pero lo que sí es sabido es que la fiesta de Las Cabezadas se ha convertido por derecho propio en una fiesta que despierta el interés de los leoneses y que, después de 853 años de tradición, merece sumar al título que ya posee de Interés Turístico Regional el de Nacional. Y lo merece, porque como ninguna otra fiesta representa a la ciudad y en ella se ven reflejados, cada vez más, los leoneses.

Las Cabezadas merece, no solo mantenerse en el tiempo, sino que debe consolidarse y mejorarse año año con cada vez mejores debates, más frescos y que sean más cercanos al ciudadano. Y a fe que lo están consiguiendo. El título de Interés Turístico Nacional vendría a consolidar una fiesta por la que también deberían apostar las futuras corporaciones, incluso añadiendo a este día otras actividades que sirvieran a esa consolidación.