La opinión del lector

Babia y el horizonte electoral

No hay nada como una buena dosis de amiguismo para encender motores en unas elecciones marcadas por la polémica. A día de hoy, al igual que en tiempos aparentemente lejanos, seguimos viendo muestras de que nuestra democracia cojea en pequeños, pero esenciales aspectos. Cuando introducimos una papeleta para apoyar a un candidato, damos por sentado que el procedimiento por el cual dicha persona ha llegado a presentarse bajo unas siglas, ha sido tan democrático como las propias elecciones. Por desgracia esto no siempre es así.

Yo, al igual que muchos de mis compañeros de partido, nos sentimos traicionados al comprobar que la lista, con la que habíamos concurrido a las últimas elecciones en representación del Partido Popular de Cabrillanes (Babia), había sido desechada directamente y sin previo aviso por algún representante del partido en la provincia. El procedimiento que venía siendo habitual para determinar quien se presentaba como cabeza de lista por un ayuntamiento, se venía haciendo de forma consensuada por los afiliados del municipio y después de ser elegido, esta persona era la encargada de presentar una lista. Sin embargo para las próximas elecciones de mayo; se ha elegido a dedo y por motivos indeterminados, que posiblemente se irán desvelando en próximas fechas, a la persona que luchará por la alcaldía del municipio sin contar, en ningún caso, con el resto de personas afines al partido. Esta situación conlleva una división entre las gentes y nos ha obligado, a algunos de nosotros, a presentar una candidatura independiente como alternativa en el ayuntamiento; pero no por despecho, sino como muestra de insatisfacción tanto por nuestra parte como por la de muchos paisanos.

Raúl Rodríguez López. CONCEJAL DEL PP EN EL AYUNTAMIENTO DE CABRILLANES

Un genio en San Andrés

S e desconoce quién es el genio al que se le ocurrió, en el Ayuntamiento de San Andrés, fastidiar a los vecinos de la calle Alondra adoptando decisiones absurdas. En dicha calle, que no tiene salida, podía aparcarse en ambos márgenes sin que se crearan problemas dado que tiene suficiente anchura. Desde hace poco el 'genio' decidió que sólo se podía aparcar en uno de los márgenes eliminando áreas de aparcamiento que son tan necesarias. Los vecinos no acababan ni acaban de entenderlo y el resultado es un rosario de multas. Bonita forma, también, de apoyar a las empresas como un taller aledaño donde están fritos a sanciones. Ahora las multas las pondremos nosotros: en las urnas.

P. Serrano. LEÓN