Herrera consolida su hegemonía incontestable

La euforia de Juan Vicente Herrera estaba justificada. Su partido, el Partido Popular, no sólo ha revalidado la mayoría absoluta en el Parlamento de Castilla y León sino que ha obtenido un triunfo sin precedentes: los 53 procuradores conseguidos por los populares suponen un hito muy difícilmente superable que consolida la hegemonía popular en la comunidad autónoma. Y el perdedor no ha sido otro que el PSOE en su noche más aciaga. Los 29 procuradores conseguidos suponen un descenso de cuatro en relación con el 2007. IU resucita de su letargo y consigue, por fin, regresar al hemiciclo autonómico mientras que la UPL, que sufre un descalabro espectacular (pierde más de 23.000 votos), sólo ha podido conseguir un procurador lo que la convierte en una fuerza residual. Castilla y León, donde el PP ha roto techos que parecían ya insuperables, es una comunidad en la que se hace especialmente explícito que se abre un nuevo ciclo político en España, una nueva etapa, en la que el PSOE se ve abocado a una profunda reflexión.

También, como es lógico, estos resultados obligan al PP a un ejercicio de responsabilidad pues en sus manos tiene la resolución de problemas muy serios que no admiten espera. Tiene todo el respaldo. Ahora toca ponerse a trabajar.