EDITORIAL
Vitatene busca salir de un letargo de años
El 1 de marzo del 2004 el Grupo Sir Fidia, propietario entonces de Antibióticos, puso en marcha una nueva industria en León. Al boato inaugural asistieron entonces todas las administraciones: Ayuntamiento, Junta, Diputación y Gobierno central. No en vano el dinero de sus ayudas fue el artífice de la creación de esta nueva empresa, que se llamó Vitatene y que llegaba como complemento de la ya maltrecha entonces Antibióticos. De hecho, nacía casi como una filial, para explorar un nuevo mercado en la investigación de productos: el de los betacarotenos naturales. Esa jornada se anunció como un gran día para León, porque estaba siendo testigo del renacer de una empresa, Antibióticos, que durante muchos años fue el motor de la economía leonesa. El paso del tiempo vino a demostrar que nada de lo dicho era cierto, o no era del todo cierto. Sí, es verdad, que Vitatene se ha mantenido en el tiempo, pero lo ha hecho con pocos trabajadores, apenas 42, de los casi 200 que se anunciaron ese mes de marzo de hace ahora siete años. Unos empleados que, además, fueron utilizados por Sir Fidia, en no pocas ocasiones, para complementar los turnos en Antibióticos.
Ayer, la fábrica leonesa revivió casi las imágenes del 2004. Como hace casi siete años, los máximos responsables de la Consejería de Economía de la Junta, de la Diputación y del Ayuntamiento asistieron esta vez al renacimiento de una fábrica que, por otra parte, sigue contando con instalaciones de primer nivel y, como hace siete años, oyeron de los propietarios, antes Fidia ahora la multinacional holandesa DSM, que el empleo y el futuro de Vitatene estaba garantizado y que incluso la fábrica iba a crecer. Es de esperar que no suceda como hace siete años y las palabras se las lleve el viento. Las administraciones han garantizado todo su apoyo, pero eso es algo que ya hicieron entonces y son muchas las ayudas que han entregado durante estos años. Ahora sólo falta que exista un control sobre en qué invierten estas ayudas los nuevos propietarios para lograr, entre todos, que Vitatene salga del letargo en el que lleva sumido años.