El abuelo de Giovanni

E l abuelo de Giovanni tiene casi noventa años y nunca había visto tocar a su nieto en un concierto. El miércoles se sentó en un lugar preferente de la bodega del palacio del Castillo de los Templarios y durante una hora y media larga no perdió detalle del sonido con que la guitarra de Giovanni Yáñez bañó las piedras venerables del recinto medieval. Supongo que los gustos musicales del abuelo están bastante alejados del estilo free-”jazz que este joven guitarrista ponferradino practica en compañía de su cuarteto hispano-”portugués Íbertet, pero la cara del anciano al final de la actuación irradiaba satisfacción. Giovanni empezó a tocar la guitarra en la adolescencia y el bicho de la música la picó para siempre, volcándose de lleno al estudio del instrumento. Actualmente cursa el grado superior de guitarra jazz en la Escola Superior de Música e das Artes do Espectáculo de Oporto, uno de los centros más prestigiosos en la materia de la península. Ha conseguido para ello una beca de la Fundación Conde de Lemos y ya sueña con dar el salto de Portugal a Holanda, buscando nuevos conceptos con los que navegar por las cuerdas de un instrumento para el que compone piezas llenas de sensibilidad, elegancia y sentido del riesgo.

El cuarteto de Giovanni abrió el Festival de Jazz de Ponferrada, que está ofreciendo estos días una buena ocasión para escuchar a algunos de los mejores instrumentistas de la comarca. Probablemente sea el campo de la música el que mayor creatividad genera en estos momentos en el Bierzo y me atrevo a pronosticar que de él saldrán las sorpresas más satisfactorias en el ámbito artístico. Incluso en géneros con escasa o ninguna tradición por estas tierras, como el del jazz, han surgido en los últimos tiempos propuestas de interés: hace un par de años la Casual Big Band y ahora grupos como «Jazz-¦Ta» o «Juanita Banana», en los que comparten escenario músicos curtidos en mil batallas, con otros más jóvenes, generando una fusión generacional de gran interés.

Es el caso de nombres como el de Toni Lozano, uno de los guitarristas más veteranos de la música comarcal, que tiene en sus manos la memoria de varias generaciones musicales de esta tierra o el percusionista aquí afincado Luis Masdeu, un referente en la historia de la música contemporánea en España, componente en su día de «Lone Star», un grupo mítico del mejor pop español. Es el caso de la joven bajista Farah García, de los guitarristas David López o Miguel Rallo, de Yolanda Arias o Ana Espada, voces nuevas de las «damas del jazz» de la comarca. Es el caso de otros nombres que completan una lista que ya empieza a ser larga y que tienen en sus manos provocarnos la misma satisfacción que tuvo el miércoles el abuelo de Giovanni.