editorial
Antibióticos: hablemos claro
La dirección de Antibióticos mantendrá hoy una reunión con los representantes de los trabajadores para decirles algo que ya saben: que la producción de penicilina no resulta rentable en el mercado actual y que abandonará esa línea de trabajo, tal y como adelantó este periódico el viernes, aunque sea «gradualmente», matiza la empresa. Ocurre después de que durante casi sesenta años esa fuese la actividad básica de la sociedad que nació a mediados del siglo pasado para convertirse en emblema del desarrollo industrial de León, una ciudad con una larga tradición vinculada a la biofarmacia y con grandes expectativas de futuro en torno a la biotecnología. Y ocurre después de que durante el último año la producción en la planta leonesa cayese preocupantemente y que concretamente en los dos últimos meses fuese mínima.
Pues bien, en ese contexto Antibióticos emitía un comunicado que venía a decir que la sociedad «está incorporando nuevos directivos y personal de alta cualificación» para «potenciar nuevas línea de negocio, algunas de las cuales se encuentran en grado de implantación significativo». Es decir, nada que no haya dicho anteriormente y no se haya quedado en una mera declaración de intenciones. En el marco de un pasado reciente realmente convulso, la empresa anunciaba en marzo un acuerdo con la norteamericana Amyris para la producción de farneseno, esencial como componente para el biodiésel renovable, los lubricantes, saborizantes, polímeros, cosméticos, etcétera.
No parece, a la vista de estas derivas, de estas verdades a medias, de estas dudas y de estas opacidades que la dirección de la empresa tenga definida una hoja de ruta fiable. Esas inseguridades se trasladan, vía trabajadores, a una sociedad en permanente alerta por los precedentes. Antibióticos tiene una responsabilidad social y laboral con los leoneses, con los ciudadanos y con las administraciones que financian los planes industriales con el dinero de todos. En consecuencia, tiene la obligación moral de aclarar, y de hacerlo hoy mismo, qué quiere y hacia dónde va. Sólo desde la transparencia se genera confianza y apoyo. Y eso es justo lo que necesita.