La Sama-Velilla vuelve sobre Riaño
La línea Sama-Velilla se ha convertido ya en un hito en los pleitos territoriales entre León y Asturias. Un conflicto de intereses que se mantiene desde hace más de dos décadas sin solución: la necesidad de una estructura de transporte eléctrico para dar salida a la producción de las centrales asturianas —defienden en el Principado— y el respeto al entorno natural, el medio ambiente y el desarrollo sostenible que albergan y persiguen los valles del norte de la provincia de León. De momento, la resistencia civil y ciudadana a este lado del Pajares ha logrado detener las pretensiones del Gobierno central y el asturiano y Red Eléctrica Española; el pasillo de sesenta kilómetros a través de bosques y montañas de la provincia, sobre torretas de sesenta metros de altura y una capacidad de transporte prevista para 800.000 watios, se ha topado con 27.000 alegaciones suficientes de retrasar la ejecución del proyecto hasta la fecha. La Sama-Velilla se asoma desde ahora a un nuevo conflicto. O a uno que ya parecía superado. El trazado por el extremo norte de la montaña oriental leonesa, por Riaño. Esa brecha quedó cerrada por los tribunales y por la Unión Europea hace ya más de una década luego de una batalla legal de los pueblos y gentes que habitan la zona, amparados por figuras de protección natural tan convincentes como la de Parque Regional, Lugar de Interés Comunitario o Zona de Especial Protección para las Aves. Hasta que el nuevo gobierno del Principado, el partido Foro Asturias de Francisco Álvarez Cascos, ha decidido agilizar el proyecto a base de recuperar el trazado inicial. El partido de Cascos defiende que la Sama-Velilla se construya por León a partir del Puerto de Tarna, a donde llega ya una estructura de torretas desde la central de Lada, heredada del proyecto que logró detener la montaña oriental leonesa. Incluso, en territorio leonés se mantienen en pie torretas de aquella estructura en la que se llegaron a gastar 10 millones de euros. Volvemos al pleito pasado que trató de dilucidar si el desarrollo económico de Asturias está por encima del desarrollo sostenible de León.