Diario de León

EL BAILE DEL AHORCADO

Enchufados

León

Creado:

Actualizado:

Me gustaría saber para qué sirve ser cronista oficial. «¡Para que te den la lata!», me contestó una vez Victoriano. Ser el guardián de la memoria de la ciudad debe pesar como una mochila de piedras y, sin embargo, hay tortas por ostentar el cargo. Antes, cuando todo eran vino y rosas, puede que tuvieras alguna que otra prebenda, que no lo sé, pero ahora... Ahora, ya no hay peculios pa ná, así que me expliquen porqué el Ayuntamiento pierde el tiempo en estos juegos florales. ¡Qué ciudad! vanidad de pueblo, pedantería del quiero y no puedo, soberbia del venido a menos (que acabamos de entrar en Cuaresma y seguimos sin interiorizar el polvo eres...) Mi enhorabuena a Máximo Cayón, que se le ve encantado con su nombramiento, pero el cargo me parece un resabio de los tiempos del Nodo que chirría un poco. Aunque bien pensado, la miseria que se nos avecina va a provocar un rewind que hará que todas estas taras trasnochadas parezcan de actualidad. Tanto como los neutrinos que, al parecer, no eran tales. Y todo por un cable mal enchufado... ¡ay! los italianos, que a nosotros no nos habría pasado porque de lo que más sabemos aquí es de apretar bien los enchufes. Cuando había para todos, la cosa iba como la seda, que nos regalábamos puestos y prebendas y todos contentos, pero lo que traen estos tiempos de menester es estrechez y ya no hay casi nada para repartir. Total, que el martes en el pleno del Ayuntamiento el salón de los Reyes se travistió en plató de Telecinco —López Benito dixit— y todos comenzaron a acordarse de la familia. Quedaron claras muchas cosas, demasiadas, teniendo en cuenta que casi diez millones de españoles están al borde de la miseria. Fue todo muy revelador, si bien la elocuencia brilló por su ausencia, as usual . Se demostró que hace falta un código de buenas prácticas, que la trasparencia es una asignatura pendiente en la administración española —amén de la leonesa—, que los modales parecen estar de huelga y que aquí la sartén le recrimina al cazo. Porque se pierde la razón cuando al acusar de hacer «política barriobajera, mezquina y chabacana» se utilizan como defensa los mismos argumentos de ataque. Y así se convierte la política en un patio de vecinos. Que si el padre, la madre, la prima, la novia... demasiado betún, que, termino como empiezo, y hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir.

tracking