León debe proteger y conservar su Semana Santa

Cinco días y León entrará de lleno en la celebración de la Semana Santa. El Viernes de Dolores supone el pistoletazo de salida a diez días de devoción, culto y un sinfín de procesiones que atraen a la provincia a numerosos turistas y curiosos.

Ahora, que la crisis ahoga aún más el consumo, que azota como nunca a todos los sectores de la economía leonesa, estos días suponen un alivio para la hostelería y el comercio de León, dos de los sectores de más peso en la Producto Interior Bruto provincial.

Comerciantes y hosteleros fijan en más de seis millones de euros el impacto de esta semana de Pasión en la economía provincial. Una clara demostración de la importancia que tiene el fomentar, conservar y proteger las tradiciones. Y ahí es donde deben dar el do de pecho todas las administraciones sin excepción, cada una en su parcela.

La Semana Santa leonesa, además de devoción y culto —importante para los creyentes— es hoy por hoy un polo de atracción turístico, que León debe proteger y conservar.