Del gran despilfarro al terrible ajuste
El repaso de los 7.000 millones de euros que ha recibido León durante los últimos trece años en los sucesivos planes para intentar buscarle un futuro mejor a la provincia es realmente descorazonador. El balance incluye un auténtico rosario de proyectos abandonados o edificios en desuso mientras la pérdida de población se ha acentuado y la situación económica es de grave estancamiento sin aportar garantías para que las próximas generaciones no tengan que optar por la emigración.
El repaso a las obras realizadas y que hoy recoge DIARIO DE LEÓN en su A Fondo permite detectar desde polígonos industriales que son auténticos páramos hasta museos que no abren sus puertas por carecer de medios, incluyendo centros médicos y geriátricos sin uso, o espacios deportivos que carecen de clientes , o todo tipo de infraestructuras innecesarias.
Fueron los tiempos del gran despilfarro, en los que no se midió bien y se buscó el proyecto fácil y el populismo cargado de euros en busca de votos o simplemente para acallar las críticas. Fue la otra burbuja, la institucional, que ha vaciado las arcas de todo tipo de administraciones y que ahora no tienen medios para hacer frente a las facturas que se acumulan en algunos casos desde hace muchos años.
El terrible ajuste que tienen que afrontar ahora los españoles en todos los frentes contrasta de manera dramática con esos planes millonarios de inversión que no hace tanto estaban en marcha y que incluso en algunos casos han dejado obras a medias. Es la herencia de unos desmanes que tampoco han dejado lo que se esperaba porque la tendencia de la provincia de León no ha cambiado y el envejecimiento poblacional sigue adelante de año en año. Ahora llega la dura factura y el resultado ha sido bastante pobre.