Una actuación tardía y muy necesaria en el río

Después de haberla demandado reiteradamente, Confederación Hidrográfica del Duero anuncia para septiembre, la época de menor caudal, el dragado y la limpieza del río Bernesga a su paso por la capital, sobre el que no se había actuado desde hace seis años. Pese a la insistencia por parte del Ayuntamiento en la necesidad de afrontar una obra más amplia, será un trabajo limitado por la disponibilidad presupuestaria, que en el caso de este tipo de actuaciones se ha reducido a una quinta parte.

El plan de la CHD es actuar exclusivamente sobre el tramo entre el viaducto Martín Granizo y el puente de San Marcos, donde el material arrastrado por el caudal y retenido por el azud ha permitido a la vegetación desarrollarse rápida y vigorosamente, reteniendo la maleza y convirtiendo en un auténtico basurero en pleno casco urbano un espacio que, paradójicamente, fue proyectado en su día como embarcadero para una alternativa de ocio. De eso quedan los restos y un gran ancla marina como testimonio.

Entendiendo las limitaciones con las que CHD se enfrenta, es razonable que centre los trabajos en ese tramo más problemático y también más expuesto a los turistas y peregrinos, para los que León no merece esa imagen.

Pero no debe olvidar quien tiene la titularidad de la gestión de los ríos que deja una actuación pendiente aguas abajo del puente de San Marcos, por muy generosa que haya sido la desarrollada en otros tramos de éste y el otro río en buena sintonía con la ciudad.