La opinión del lector
¡Que el embalse de Villagatón funcione ya!
Hace 20 años aproximadamente que se construyó el pantano de Villagatón, en el corazón de La Cepeda. Los fines de dicho embalse eran los siguientes: conservar el caudal ecológico del río Porcos, nuevos regadíos aguas abajo, ayudando al embalse de Villameca que riega cuatro mil hectáreas y que resulta generalmente deficitario. También se convertiría en un seguro para poder dotar de agua de boca a la ciudad de Astorga en caso de que hubiese necesidad.
Los padrinos de dicho proyecto fueron Jaime González, consejero de Agricultura de la Junta de Castilla y León, y Antonio Natal, procurador cepedano en las Cortes de Castilla y León. Ambos consiguieron una primera inversión de mil millones de pesetas. Seiscientos los pondría la Diputación Provincial (León) y cuatrocientos la Junta de Castilla y León. La Junta Vecinal de Villagatón consiguió unos trescientos millones de pesetas más, y la Junta de Castilla y León aportó de motu proprio algún dinero más para terminar las obras complementarias. Es decir, estamos hablando de una inversión total de unos mil quinientos millones de las antiguas pesetas.
Por desgracia este magnífico embalse aún no está en producción. Las excusas que dan la Confederación Hidrográfica del Duero y la Junta de Castilla y León, entidades competentes en el caso, son relativamente variadas y simples: aún no se ha pagado el suelo a inundar por el pantano, no están resueltos los problemas de logística y seguridad, etc. Digo que estas excusas son simples y poco convincentes porque si los terrenos expropiados debían pagarse con esos 1.500 millones de pesetas, ¿quién se llevó el dinero que debía estar en los bolsillos de los respectivos propietarios de los terrenos? Y si las expropiaciones no se contemplaban en ese presupuesto, ¿cómo se puede parar una obra tan cara y tan necesaria por cuatro duros que valen las expropiaciones?
La seguridad o el personal de vigilancia podría ser suplido posiblemente por el que trabaja en el pantano de Villameca, que está muy cerca de Villagatón. En años de sequía como éste, el pantano de Villagatón, además de evitar el desastre ecológico del río Porcos, podría ayudar al de Villameca para que no se malograra un 40% de la cosecha de regadío.
El otro día, en las fiestas de Porqueros, pude ver personalmente cientos de truchas muertas en el río Porcos porque baja prácticamente seco, no tiene caudal ecológico.
Para más inri, algunos inviernos la Confederación cierra el embalse y cuando está prácticamente lleno, viene un señor clandestino, que debe ser presuntamente de la propia Confederación y en pocos días del mes de mayo, suelta todo el agua almacenada dejando seco el embalse. ¿No se podría soltar el agua durante el verano para conservar el caudal ecológico, etc...?.
Naturalmente que se puede, pero falta voluntad política y sobra, al parecer, mala leche y escasez de conciencia ecológica.
Quiero felicitar a la Asociación Cultural de Porqueros, constituida recientemente, por ser la pionera en denunciar este desastre ecológico y pedir que se ponga el embalse a funcionar.
El Seminario de Estudios Cepedanos que presido es la más veterana de las Asociaciones Culturales de La Cepeda. Ya colaboró en el estudio de Comarca de Acción Especial para nuestra zona, y pide a todas las asociaciones cepedanas que manden escritos a la Confederación, a la Junta de Castilla y León y a los medios de comunicación para que se cierre el pantano y se administre el agua con responsabilidad.
Hacemos extensiva esta invitación a las Juntas Vecinales de los pueblos afectados y a todos los cepedanos que quieran colaborar.
Entre todos tenemos que lograr que se ponga en producción el embalse de Villagatón y que se le saque rendimiento ecológico y agrícola a esta importante inversión de dinero público.
Antonio Natal. PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN CULTURAL SEMINARIO DE ESTUDIOS CEPEDANOS
Aclaración sobre la historia de Rafael Burgueño
En relación con el reportaje publicado por el Diario de León, en la sección del Bierzo (6/8/2012), y que fue titulado El otro Queipo de Llano , deseo manifestar lo siguiente: En este artículo —sin prejuzgar la buena fe de su autor— se dan por ciertos hechos que no lo son, atentatorios al honor de Rafael Burgueño.
En el artículo se le atribuye un desfalco y una estafa en relación con su banca de Cacabelos y se afirma que «desapareció llevándose el dinero de sus clientes», cuando lo realmente ocurrido fue que se trasladó a la ciudad de Madrid no pudiendo llevarse nada porque de nada disponía, al tenerlo todo embargado, tanto lo suyo como lo de sus hermanos. Con ello la familia Burgueño al completo quedaba en la ruina.
El origen de la situación estuvo en una falta de liquidez, que motivó una suspensión de pagos y que devino en una declaración judicial de quiebra fortuita, sin imputación de delito alguno contra la persona de Rafael Burgueño, que siguió viviendo en la ciudad de Madrid hasta su muerte, siempre en condiciones económicas muy precarias.
Julio Burgueño Cela. VILLAFRANCA DEL BIERZO