EDITORIAL
Quiñones tiene razón: León no es prioritario
El frenazo que sufren las infraestructuras que están en estos momentos en obras en la provincia de León es más que evidente. Frente a los constantes avances que se están dando en otros proyectos como el AVE a Galicia, en el caso de León su proyecto ferroviario está varado, la A-60 tiene un futuro incierto, la integración de Feve se ha limitado y la reforma del Parador de San Marcos o la Ciuden se han ido al cajón.
Y el subdelegado del Gobierno, Juan Carlos Suárez Quiñones lo deja claro: «todo es una cuestión de prioridades».
En estos momentos las grandes obras pendientes en León están paralizadas y lo que es peor nadie se atreve a fijar ningún tipo de plazo para la reanudación. En algunos casos alcanzaron un grado de ejecución incluso del 70 o del 80 por ciento y desde entonces se han visto varadas sin que se avancen en los despachos los necesarios pasos para que los trabajos puedan continuar sobre el terreno.
Está todo parado y eso es incomprensible. Los ciudadanos no pueden entender esa situación cuando miran hacia otros lugares en los que sí se dan pasos adelante en las infraestructuras. De las palabras del subdelegado del Gobierno se puede desprender un mensaje claro: Galicia sí es prioritaria, quizás porque allí hay elecciones en octubre.
Pero no es legítimo que la gestión desde las administraciones se plantee en clave de citas con las urnas. Las prioridades deben tener unos criterios mucho más limpios.